Hoy parece una especie de día 5 de enero. Por la noche llegan los Reyes Magos, Fanego y Tamara y estamos con ganas de verles! Compartiremos con ellos los próximos cuatro días. Todos los que nos quedan en Indonesia, por cierto.

Por la mañana salimos a desayunar al mismo lugar donde cenamos ayer. Los desayunos orientales no son santo de nuestra devoción, la verdad es que no. Con el estómago lleno decidimos dar una vuelta por la zona del puerto, pero el calor es insoportable. Hay muchos karaokes cerrados. Compramos unos noodles para comer y nos vamos para casa. Despacio, que mi chancla decide que es buen momento para romperse 🙂

Comeremos tranquilos. Postales, Skype con la familia y pronto llegarán estos. Abrazos y en marcha. Daremos una vuelta por todo el paseo marítimo mientras anochece. Está bastante más tranquilo que en los días anteriores. Por la mañana habíamos descubierto una especie de food court y ese fue el lugar elegido. Con vistas al puerto.

Nos fuimos poniendo al día y después de cenar, decidimos ir a tomar una última cerveza cerca del hotel. No tienen en los pocos sitios que vemos abiertos. En el que sí, es más cara que en Malasaña. Así que… pronto a dormir.