Día casero. Escribiendo y eso 🙂 Como otros muchos en Melbourne. Buen desayuno. Después me corté el pelo y afeité que ya parecía Tom Hanks 🙂 Después, salimos a hacer algunas compras. La idea era ir al Aldi a comprar comida para toda la semana, pero hubo algunas paradas intermedias 🙂

La primera fue una parada en Rebel, el líder de las tiendas de deportes down under para comprar unas zapas para Nagore. Y la segunda fue un pequeño viaje en el tiempo a 1993. Eran tiempos en los que se podía fumar en todos los sitios y entre ellas en los recreativos. Donde con 100 pesetas echabas la tarde. Hasta esos recuerdos me transporté en Blue Bar. Un bar de copas que en 10 días celebraría su 20 aniversario pero cuya puerta estaba protegida por una máquina del año 93.

NBA Jam. Un juego que reescribió las reglas del arcade y que es uno de los arcades más ¿taquilleros? ¿monederos? de la historia. La partida tuvo emoción hasta el último segundo. Iba perdiendo cuando quedaban 3 décimas de segundo. Hice un Llull y listo 🙂

Sin más entretenimientos, llegamos ya al súper. Hicimos la compra, nos cargamos como mulos y volvimos a casa despacico. Nos preparamos unos spaghetti carbonara con huevo como mandan los italianos que estaban realmente buenos. Pasamos la tarde escribiendo. Ya por la noche, seguimos con nuestro particular cine club melbournés.