Las dos Torres de Malasia

Hoy haremos un poco de turisteo por  Kuala Lumpur. ¿qué es lo más famoso de Kuala Lumpur? Sí señores, las torres Petronas. Será nuestro principal destino de hoy, pero aprovecharemos también para ver algunos rinconcitos más de la capital malaya.

Hoy es sábado, sabadete. Y como buenos lugareños pasaremos la mañana en el Ikea. Sí amigos, en el Ikea de Kuala Lumpur. Edu se acaba de mudar y necesita algunas cosillas para decorar su nuevo hogar. Se queda alucinando cuando Pedro y yo insistimos en ir con él. Ir al Ikea es como estar en casa. 😉

El Ikea está recién inaugurado y su alrededor están construyendo un gran centro comercial. Es lo que se lleva por aquí. A pedro le llama la atención que el parking las plazas de minusválidos estén señalizadas con luces azules. Esta tienda Ikea es igual que los demás. Terminamos de comprar y nos comemos unos perritos calientes (típico de Ikea).

Las dos Torres

Tras el Ikea decidimos ir al centro comercial Pavillion, a por más provisiones. Pasamos por casa, contemplamos las hermosas vistas desde el piso 29 (3 pisos más bajos que la casa de Edu) y decidimos ir hacía las Petronas. Uno de los servicios que ofrecen los Condo en Kuala lumpur, es que cuentan con una minivan que te acerca al centro. Así que nos subimos a ella y nos dejó justo debajo de las dos torres más emblemáticas de Kuala Lumpur.

El arquitecto argentino César Pelli fue el encargado del diseño, inspirado en la estrella de ocho puntas islámica.
Malasia es un país con una gran influencia islámica. 

Las Torres Petronas son la sede de la Corporación Nacional de Petróleo de Malasia y su construcción costó más de 950 millones de euros. Una pastaca. 

Pero además, en los pisos inferiores de las inmensas torres han construido un centro comercial. (otro más). Bien por nosotros que nos morimos de hambre. El lugar escogido un restaurante japonés, llamado Sushi King con su cinta de platos rodando. Yumiii 🙂

En Kuala Lumpur, hemos ido a algún que otro Centro Comercial, y esta vez también sucumbí a comprarme algún que otro trapito (los necesitaba porque la secadora me había encogido dos pantalones. ;(

Ahora sí con el estómago lleno tocaba hacer un poco de paripé y las típicas fotos debajo de las Petronas. Todo muy típico. A mí me parecieron espectaculares. Son altas de cojo…, pero bonitas bonitas, no sé. Demasiado hierro y metal. (lo siento arquitecto argentino).

Desde su construcción mantuvo el récord de altura durante 7 años (1998-2004).
Hoy en día el récord se bate cada uno o dos años aproximadamente.

Templo Chino en Malasia

Malasia es un país multicultural. Sin duda. Cuando viajas te das cuenta de la diversidad cultural de cada país, y como han sabido convivir durante siglos diferentes culturas, etnias y religiones en Asia. Mola mucho.

Pedimos un Ubersito y nos dirigiremos al templo Thean Hou. Tuvimos mucha suerte porque justo ese día había una gran ceremonia para recaudar fondos y nos recibieron con dragones chinos y tambores.

El santuario se edificó en el año 1894 por la comunidad Hainanese de Kuala Lumpur, y está situado en un sitio privilegiado, ya que se  encuentra en una colina. Desde el templo se puede  contemplar unas maravillosas vistas de la ciudad.

Este lugar es uno de los templos más antiguos y más grandes en el sudeste de Asia y toda una belleza, la verdad. El santuario se construyó para adorar a la diosa  Tian Hou, protectora de los pescadores. Asimismo en el templo, entre otras diosas, podemos encontrar a Guan Yin, la Diosa de la misericordia. Muchos devotos acuden al santuario a adorar a esta diosa. Nosotros probamos suerte con los palillos chinos para saber que nos depararía el futuro. Quizá acierten, quizá no. El futuro nos lo dirá.

Al salir del templo pudimos disfrutar del  jardín chino con hierbas medicinales y del estanque de tortugas junto a un pozo, así como un jardín con estatuas de los diferentes signos zodiacales chinos.

Sábado noche

Después de tanto turisteo volvemos a nuestro dulce barrio a Bukit Bintang. Tenemos ganas de un italiano, así que nos metemos en el primero que vemos. En la terracita, con nuestras cervezas Tiger estamos la mar de bien. Pizza y ensalada, ricas pero sin más. Vamos al Pinchos (me duele escribir esta palabra así, es con tx, por dios) y nos pedimos unos Kalimotxos. 🙂 Nos lo ponen con lima (las lágrimas son reales).

Nos echan del bar (porque cerraban, no por broncas) y nos vamos a tomar lo que nos queda en el piso 29 del Edificio de Edu. Hay camas en la terraza, y pasamos el rato disfrutando de las vistas, como unos señores.

Ya se hace tarde, y nos estamos quedando dormidos, así que nos vamos a dormir. Buenas noches.

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