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Singapur. Asia de lujo

Hoy toca día de viaje. Madrugón y paliza de autobús y avión. Penang es dónde nos despertamos, pero Singapur dónde dormiremos. Hoy el día parece que dura como 36 horas.

Nos hemos levantado en Penang y tenemos que coger el bus que nos llevará a Kuala Lumpur. Sale a las 7:30, así que antes de las 6:00 ya estamos despiertos y dejando el Hostel. Vamos en bus de línea, hasta la estación principal. Todo bajo control. Llegamos sin problemas, ya que a esa hora el tráfico es escaso.

En el autobús de Penang hasta Kuala Lumpur vemos el amanecer. Muy chulo. El cielo estaba rojo de repente. Las vistas desde el puente que une Penang con el resto de Malasia, esa mañana, eran impresionantes.

Intentamos dormir lo que podemos en el bus, y llegamos a Kuala Lumpur. La nuestra es la primera parada, Central Station. Desde allí sale un tren express al aeropuerto (la identidad corporativa de los trenes en Malasia se parece bastante a la de Renfe), pero es muy caro, y vamos en busca del bus. Tardamos un rato, estamos un poco cansados y desorientados. Pero por fin damos con el bus al aeropuerto. Nos hemos ahorrado un pastizal.

Llegamos al aeropuerto con tiempo de sobra y decidimos comer algo. Hemos entrado a las puertas de embarque y casi no hay sitio para comer. 🙁 Volvemos al principio, cerca de los arcos de seguridad, y nos sentamos en una cafetería. La comida era un poco mala, pero es lo que hay. Me duermo en mi sillón. Estoy muy cansada. En el avión nos dan dos asientos de ventanilla, uno detrás de otro. Esta guay, porque así no discutimos por el asiento. 😉

Llegamos por fin a Singapur. Al salir del avión nos hacen pasar nuestro equipaje de mano por unos arcos de seguridad (no se fían de la seguridad malaya). Y salimos del aeropuerto en busca del bus 36 que nos deje en el centro, para coger el metro y llegar a China Town donde está nuestro hostel.

Un largo viaje. En el hostel no hay recepcionista, trabajan sólo de 10:00- 18:00. En el buzón encontramos una llave y el número de nuestras camas. La situación del Hostel es increíblemente buena. El Hostel en sí, no. Pero Singapur es carísimo y no podemos permitirnos un Hotel. 🙁

Es tarde, y decidimos cenar en la calle Smith en Chinatown, debajo del Hostel. Una calle de restaurantes muy chula. Algunos restaurantes están cerrados, pero el último de la calle nos dan de cenar. Muy caro en comparación con Indonesia o Malasia, pero tenemos que alimentarnos. 🙂

Estamos muy cansados pero parece que con la cena hemos recuperado fuerzas. Decidimos ir a la bahía a ver el Marina Bay Sands. Estuvimos muy a gusto paseando por Singapur de noche. Es una gran ciudad, cuidada y limpia. Muy moderna.

Es Skyline de Singapur es muy característico. Las luces de los edificios y su reflejo en la bahía es digno de contemplar.

Después de un buen  rato, volvemos al hostel. Dormimos con otros 16 en la habitación, con el aire y los ventiladores apuntándote directamente a la cabeza. Me da una ataque de tos. Conseguimos dormirnos. Buenas noches.

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