Otro día de Chiang Rai. El norte de Tailandia es muy bonito, y si tenéis algo de tiempo, podéis visitar los lugares más típicos de la zona, pero por vuestra cuenta. Las excursiones, son mucho más caras que los autobuses locales, y si vas por tu cuenta, puedes disfrutar tranquilamente de los lugares, sin prisas, y sin que nadie te espere (o viceversa).
Nosotros hoy iremos a la casa negra. Junto con el Templo Blanco, es lo que hay que ver en Chiang Rai.
Baan Dam, todo negro
Al igual que el Templo Blanco, la Casa Negra, conocida como Baan Dam, está impulsada por un artista local. Thawan Duchanee. El artista, que falleció en el 2014, supo crear un ambiente oscuro, pero a la vez hermoso. En el complejo está compuesto de más de 32 cabañas, todas ellas diferentes, construidas en madera negra. La colección de pieles, huesos y dientes de numerosos animales adornan cada rincón. Hay hasta el esqueleto de un elefante, todo muy surrealista. Extrañamente hermoso.
El templo principal es una gran estructura de madera, decorada con pieles y huesos de animales, donde la madera es la auténtica protagonista. Es curioso que en el centro del templo nos encontramos con una larga mesa de madera con bancos a ambos lados, acompañada eso con una línea de piel de serpiente. Un espectáculo muy extraño. Había un músico amenizando la jornada dentro del templo, junto a poemas del artista. Todo muy raro.
Al salir de aquel lugar tan extraño, decidimos volver a coger el autobús y visitar un poblado de las famosas mujeres jirafas. Sin embargo, en el autobús que nos dijeron que nos subiéramos, no nos entendimos bien. Al cabo de un rato, nos bajamos sin saber muy bien dónde estábamos. 🙁
Era la tarde, y teníamos hambre, así que allí, en medio de la nada, en Thanchanok Village, encontramos un restaurante, y allí que entramos. Lo mío demasiado picante. Que rabia. En el sudeste asiático siempre preguntad si algo es picante o no. Porque casi todo es picante. 😉
Decidimos dejar el poblado para el día siguiente y volver a Chiang Rai. Autobús en dirección contraria y vuelta a casa.
Noche de compras
Los mercado nocturnos, son algo muy típico de Asia. Y Chiang Rai, no va ser menos. Así que tras descansar un poco en el hotel, nos fuimos a cenar al mercado nocturno. Si vais a Chiang Rai, no os perdáis el night market. Fue muy divertido, con espectáculo y todo. Además las tiendas son diferentes a los puestos que te puedes encontrar en Chiang Mai. Más originales y diferentes. Moló mucho.
Después de cenar unas setas chinas (bastante chamuscaditas para mi gusto) y un plato de pasta, dimos otra vuelta por los puesto y a dormir. Buenas noches.