Tras la escala involuntaria de anoche, volvemos a la gare routiere a coger el taxi brousse que ha de llevarnos a Ambositra. Como casi siempre, saldrá con mucho retraso sobre la hora aproximada que nos habían indicado. Lo que sí nos dio tiempo fue a presenciar una pequeña y tumultuosa pelea.
Ambositra, capital de la talla
Tras dedicar la mañana a recorre de nuevo la route nationale 7, llegaremos a nuestro destino sobre la hora de comer. Nos alojamos en el Hotel L´Artisan, quizá el alojamiento más agradable (después de la casa de Raquel y Adrien) que tendremos en la isla roja en todo el viaje.
Por la tarde, salimos a descubir esta bella ciudad, capital de la región de Amoron’i Mania, y del Distrito de Ambositra. La ciudad es conocida por el bello trabajo de talla de madera realizado por sus habitantes, de la etnia Zafimaniry. Desde 2003, este arte es Patrimonio inmaterial de la Unesco.
Los zafimaniry son madereros, carpinteros y artesanos desde generaciones. Han creado en torno al trabajo de la madera todo un conjunto de técnicas y conocimientos. Para su artesanía utilizan 20 especies locales de árboles diferentes, adaptados cada uno de ellos a un tipo de construcción o a una función decorativa específica.
Yo recuerdo que fue un paseo muy agradable. Fuimos bordeando pequeños campos de arrozales, hasta llegar a una zona donde había un talleres de trabajo, donde nos invitaron a pasar.
Estuvimos un rato viéndoles trabajar, no nos intentaron vender nada y de hecho nos regalaron un pequeño colgante de un corazón. Si hay algún interesado en visitar el taller de carpinteros en Ambositra la información de contacto está en la foto.
Durante todo el viaje del año 2016 no compramos prácticamente nada, pues no podíamos transportar más equipaje del mínimo. Aún no lo sabíamos pero acabaríamos comprando una obra de los Zafimaniry más adelante en Tana.
Llegamos después a una zona de venta orientada a turistas con pequeñas tiendas tipo tinglados marítimos (mucho años después, la calle del Noviciado en Madrid, me recordaría a esta de Ambositra) Durante todo el día la luz en la ciudad fue perfecta, no había mucha gente… tengo un recuerdo muy muy bueno del día que pasamos.
Tras nuestro paseo y ya mientras anochecía, volvimos al hotel y cenamos, recuerdo que muy bien, en el restaurante (comida «europea») y ya en la cama, vimos un capítulo muy interesante de una serie muy interesnte.